Con la del invierno, las ganas de pasar un agradable dia en la nieve aumentan. La nueva temporada está a la vuelta de la esquina, y nuestras ganas de coger los esquís o la tabla de snowboard son máximas. En Buendia os animamos aa pasar un feliz dia en la nieve, y para los que sea su primer dia en la nieve, os dejamos una serie de consejos que debéis tener en cuenta. ¡No los pierdas!
Te damos una primera clase introductoria antes de esquiar. ¡Verás qué fácil es!
Las montañas cubiertas de blanco vislumbran una de las estaciones más increíbles del año. Toca abrigarse bien, coger el material adecuado y salir de casa a pasar un día de nieve inolvidable. Eso sí, no serán pocos los que todaví se han estrenado sobre el manto blanco que cubre los altos de las montañas. ¡No te preocupes! Próximo os presentamos los consejos más importantes para que tu primera vista sea amena, agradable y divertida.
No tengas miedo a las caídas
¿Cuántas veces hemos escuchado que la vida en general está cayendo y subiendo? En tu primer dia en la nieve es algo parecido. Porque lo primero que debes tener claro es que te vas a caer. Eso sí, evita, pese a ello, pensar que esto no es lo tuyo o que no vas a volver. Lo normal es sentirse algo torpe en los inicios, pero no te preocupes. A todos nos ha pasado. Nadie se ha librado de caerse muchas veces en sus primeros días en la nieve, por lo que esto no debe ser motivo de agobio. Con el paso de los días te irás encontrando más suelto e irás avanzando, teniendo más equilibrio y soprendiéndote a ti mismo.
Nadie nace aprendido, y en la nieve, el paso de los días te hará acumular la experiencia necesaria para regresar día tras día hasta que seas un verdadero experto. Eso sí, debemos insistirte en que te des tiempo a ti mismo y no tengas miedo a las caídas del primer día.
Uno de los mejores consejos que podemos arte es que dejes tus miedos en casa
Apúntate a clases
Otra de las claves en tu primer día de nieve es no pensar que sabrás esquiar o slizarte en la tabla de snowboard sin ningún tipo de problema. Incluso creer que con los consejos de un familiar, amigo o conocido ya lo sabes todo. Eso sería un error. Aunque tengas a tu lado gente que te acompañe en tu primer día, es muy importante que vayas a clase, sobre todo en tus primeros días sobre la blanca nieve.
Las clases te quitarán los posibles vicios necesarios que puedas coger y te ayudaran a ganar en confianza. Estas son solo algunas de las ventajas que te ofrecerán él seguirá los consejos de un profesional, que además te señará bonitas e increíbles rutas que se adaptarán siempre al conocimiento y nivel que tendrás sobre los squís.
No ajuste demasiado los ganchos de las botas
Es muy importante que las botas vayan ceñidas, ya que es la bota la que provoca el movimiento de los squís, por lo que cuantas más apretadas, mejor. Sí Sí no olvides que el apretar bien las botas no significa que te lleguen a hacer daño. En tu primer día en la nieve, antes de subirte encima de los squís o la tabla procura que las botas estén apretadas, pero lo más importante es que te sientas cómodo. Además, es importante que una de las ventajas que tienes a la hora de esquiar es que puedes parar cuando quieras apretar y ajustar las botas a tu gusto cuando quieras.
Los comienzos van a ser un poco complicados, ¡no te desanimes!
Cuidado con el suelo
No es el verano, lo sabemos, pero mucho ojo con los rayos de Sol. Si en la playa te quemas… ¡Imagina en la montaña y seronado de nieve! La parte superior del sitio que encontrarás y el reflejo blanco de la nieve hacen de este un espejo que puede causar quemaduras en la piel. Por ello, te recomendamos que no olvides la crema solar y usa unas gafas de esquí, aunque sea un día tapado. Es muy importante seguir estos consejos para evitar quemaduras.
La mirada siempre al frente
Sobre los squís, te recomendamos que vayas como en el coche, es decir, con los cinco sentidos puestos en lo que estás haciendo. Nunca apartes la mirada de lo que tienes de frente. Es muy sencillo, y más en los primeros días, anticiparse a los movimientos de la gente de bajada y mirar, a su vez, hacia dónde quieres ir. Pese a ello, el centrar toda tu atención en tus movimientos sobre los squís o la tabla de snowboard te permitirárre que tu cuerpo se desplace hacia el lado que quieras. ¡Y un consejo más! No novias a tus pies, porque estaras perdido.
Nunca desvíes tu mirada del objetivo, que es mantener el equilibrio
Haz del suelo tu fiel amigo
No sé si creerás que es la mejor opción de todas, pero en el caso de que la cosa se complique es mejor echarse al suelo antes que chocar o hacerte daño contra algo. Puedes verlo como una tontería, pero comprenderás también que tirarse al suelo es mucho mejor que estrellarte contra un árbol, una valla o desviarte de la pista. Ten en cuenta esta recomendación.
No olvides disfrutar del après ski
Tu día en la nieve será un día muy duro, sobre todo en lo físico. Es probable que en tu primer día acabes muy cansado, por lo que después de esquiar te recomendamos relajarte con tu familia y amigos en los magnificos locales que hay en todas las estaciones. Muchos bares cuentan con música en vivo para redondear un fantástico día en la nieve. Toma un respiro y vuelve a divertirte después de esquiar, lo cual favorecerá a que te resulte más ameno volver al día siguiente.
Y después de esquiar, ¡a pasarlo en grande en los après ski!
Desde Buendía esperamos que con estos siete consejos, podamos ayudarte a pasar un Feliz primer día en la nieve. Si los sigues todos estaréis preparados para afrontar vuestra primera experiencia sobre el blanco. Eso sí, recuerda, como te hemos dicho al principio, que no te vas a biblioteca de alguna caída. ¡Enfruta tu primer día en la nieve, seguro que repetirás!